Todas las entradas de: ¡¡¡No dejes de soñar y sonreír!!!

Martes de la vigesimonovena semana de Tiempo Ordinario. 

24/10/2017
PRIMERA LECTURA
Si por el delito de uno solo la muerte inauguró su reinado, con cuánta más razón reinarán en la vida
Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Romanos 5, 12. 15b. 17-19. 20b-21

Hermanos:

Lo mismo que por un hombre entró el pecado en el mundo, y por el pecado la muerte, y así la muerte se propagó a todos los hombres, porque todos pecaron.

Si por el delito de uno solo murieron todos, con mayor razón la gracia e Dios y el don otorgada en virtud de un hombre, Jesucristo, se han desbordado sobre todos.

Si por el delito de uno solo la muerte inauguró su reinado a través de uno solo, con cuánta más razón los que reciben a raudales el don gratuito de la justificación reinarán en la vida gracias a uno solo, Jesucristo.

En resumen, lo mismo que por un solo delito resultó condena para todos, así también por un acto de justicia resultó justificación y vida para todos.

Pues, así como por la desobediencia de un solo hombre, todos fueron constituidos pecadores, así también por la obediencia de uno solo, todos serán constituidos justos.

Donde abundó el pecado, sobreabundó la gracia, para que, lo mismo que reinó el pecado a través de la muerte, así también reinara la gracia por la justicia para la vida eterna, por Jesucristo, nuestro Señor.

Palabra de Dios.

SALMO RESPONSORIAL 39, 7-8a. 8b-9. 10. 17
R. Aquí estoy, Señor, para hacer tú voluntad.

Tú no quieres sacrificios ni ofrendas,
y, en cambio, me abriste el oído;
no pides holocaustos ni sacrificios expiatorios;
entonces yo digo: «Aquí estoy». R.

«- Como está escrito en mi libro –
para hacer tu voluntad.
Dios mío, lo quiero, y llevo tu ley en las entrañas». R.

He proclamado tu justicia
ante la gran asamblea;
no he cerrado los labios, Señor, tú lo sabes. R.

Alégrense y gocen contigo
todos los que te buscan;
digan siempre: «Grande es el Señor»,
los que desean tu salvación. R.

 

Aleluya Rom 8, 15bc
R. Aleluya, aleluya, aleluya.

  1. Estad despiertos en todo tiempo,
    pidiendo manteneros en pie ante el Hijo del hombre. R

 EVANGELIO
Bienaventurados los criados a quienes el señor, al llegar los encuentre en vela
Lectura del santo Evangelio según san Lucas 12, 35-38

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:

«Tened ceñida vuestra cintura y encendidas las lámparas. Vosotros estad como los hombres que aguardan a que su señor vuelva de la boda, para abrirle apenas venga y llame.

Bienaventurados aquellos criados a quienes el señor, al llegar, los encuentre en vela; en verdad os digo que se ceñirá, los hará sentar a la mesa y , acercándose, les irá sirviendo.

Y, si llega a la segunda vigilia o a la tercera y los encuentra así, bienaventurados ellos».

Palabra del Señor.

Lunes de la vigesimonovena semana de Tiempo Ordinario. 

23/10/2017
Está escrito por nosotros, a quienes se nos contará: nosotros, los que creemos en él
Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Romanos 4, 20-25

Hermanos:

Abrahán, ante la promesa divina no cedió a la incredulidad, sino que se fortaleció en la fe, dando gloria a Dios, pues estaba persuadido de que Dios es capaz de hacer lo que promete; por lo cual le fue contado como justicia.

Pero que “le fue contado” no está escrito solo por él; también está escrito por nosotros, a quienes se nos contará: nosotros los que creemos en el que resucitó de entre los muertos a Jesucristo nuestro Señor Jesús, el cual fue entregado por nuestros pecados y resucitó para nuestra justificación.

Palabra de Dios.

SALMO RESPONSORIAL Lc 1, 69-70. 71-72. 73-75
R. Bendito sea el Señor, Dios de Israel, porque ha visitado a su pueblo.

Suscitándonos una fuerza de salvación
en la casa de David, su siervo,
según lo había predicho desde antiguo
por boca de sus santos profetas. R.

Es la salvación que nos libra de nuestros enemigos
y de la mano de todos los que nos odian;
realizando la misericordia que tuvo con nuestros padres,
recordando su santa alianza. R.

Y el juramento que juró a nuestro padre Abrahán
para concedernos
que, libres de temor, arrancados de la mano
de los enemigos,
le sirvamos con santidad y justicia,
en su presencia, todos nuestros días. R.

 

Aleluya Mt 5, 3
R. Aleluya, aleluya, aleluya.

  1. Bienaventurados los pobres de espíritu,
    porque de ellos es el reino de los cielos. R

 EVANGELIO
¿De quién será lo que has preparado?
Lectura del santo Evangelio según san Lucas 12, 13-21

En aquel tiempo, dijo uno de entre la gente a Jesús:

«Maestro, dile a mi hermano que reparta conmigo la herencia».

Él le dijo:

«Hombre, ¿quién me ha constituido juez o árbitro entre vosotros?».

Y les dijo:

«Mirad: guardaos de toda clase de codicia. Pues, aunque uno ande sobrado, su vida no depende de sus bienes».

Y les propuso una parábola:

«Las tierras de un hombre rico produjeron una gran cosecha.

Y empezó a echar cálculos, diciéndose:

«¿Qué haré? No tengo donde almacenar la cosecha».

Y se dijo:

«Haré lo siguiente: derribaré los graneros y construiré otros más grandes, y almacenaré allí todo el trigo y mis bienes. Y entonces me diré a mí mismo: alma mía, tienes bienes almacenados para muchos años; descansa, come, bebe, banquetea alegremente».

Pero Dios le dijo:

«Necio, esta noche te van a reclamar el alma, y ¿de quién será lo que has preparado?»

Así será el que atesora para sí y no es rico ante Dios».

Palabra del Señor.

Sábado de la vigesimoctava semana de Tiempo Ordinario. 

21/10/2017
PRIMERA LECTURA
Apoyado en la esperanza, creyó, contra toda esperanza
Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Romanos 4, 13, 16-18

Hermanos:

No por la Ley sino por la justicia de la fe recibieron Abrahán y su descendencia la promesa de que iba a ser heredero del mundo.

Por eso depende de la fe, para que sea según gracia; de este modo, la promesa está asegurada para toda la descendencia, no solamente para laque procede de la ley, sino también para la que procede de la fe de Abrahán, que es padre de todos nosotros.

Según está escrito: «Te he constituido padre de muchos pueblos»; la promesa está asegurada ante aquel en quien creyó, el Dios que da vida a los muertos y llama a la existencia lo que no existe.

Apoyado en la esperanza, creyó contra toda esperanza que llegaría a ser padre de muchos pueblos, de acuerdo con lo que se le había dicho:

«Así será tu descendencia».

Palabra de Dios.

SALMO RESPONSORIAL 104, 6-7, 8-9, 42-43
R. El Señor se acuerda de su alianza eternamente.

¡Estirpe de Abrahán, su siervo;
hijos de Jacob, su elegido!
El Señor es nuestro Dios,
él gobierna toda la tierra. R.

Se acuerda de su alianza eternamente,
de la palabra dada, por mil generaciones;
de la alianza sellada con Abrahán,
del juramento hecho a Isaac. R.

Porque se acordaba de la palabra sagrada
qué había dado a su siervo Abrahán.
Sacó a su pueblo con alegría,
a sus escogidos con gritos de triunfo. R.

 

Aleluya Jn 15, 26b. 27a
R. Aleluya, aleluya, aleluya.

  1. El Espíritu de verdad dará testimonio de mí – dice el Señor -;
    y vosotros daréis testimonio. R

 EVANGELIO
El Espíritu Santo os enseñará en aquel momento lo que tenéis que decir
Lectura del santo Evangelio según san Lucas 12, 8-12

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:

«Todo aquel que se declare por mí ante los hombres, también el Hijo del hombre se declarará por él ante los ángeles de Dios, pero si uno me niega ante los hombres, será negado ante los ángeles de Dios.

Todo el que diga una palabra contra el Hijo del hombre podrá ser perdonado, pero al que blasfeme contra el Espíritu Santo no se le perdonará.

Cuando os conduzcan a las sinagogas, ante los magistrados y las autoridades, no os preocupéis de cómo o con qué razones os defenderéis o de lo que vais a decir, porque el Espíritu Santo os enseñará en aquel momento lo que tenéis que decir».

Palabra del Señor.

Viernes de la vigesimoctava semana de Tiempo Ordinario. 

20/10/2017
PRIMERA LECTURA
Abrahán creyó a Dios, y le fue contado como justicia
Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Romanos 4, 1-8

Hermanos:

¿Qué diremos que obtuvo Abrahán, nuestro padre según la carne?

Si Abrahán fue justificado en virtud de las obras, tiene un timbre de gloria, pero no delante de Dios; pues; ¿qué dice la Escritura?

«Abrahán creyó a Dios, y le fue contado como justicia».

A alguien que trabaja, el jornal no se le cuenta como gracia, sino como algo debido; en cambio, a alguien que no trabaja, sino que cree en el que justifica al impío, la fe se le cuenta como justicia.

Del mismo modo, también David proclama la bienaventuranza de aquel a quien Dios le cuenta la justicia independientemente de las obras.

«Bienaventurados aquellos a quienes se les perdonaron sus maldades y les sepultaron sus delito; bienaventurado aquel a quien el Señor no le ha contado el pecado».

Palabra de Dios.

SALMO RESPONSORIAL 31, 1-2- 5. 11
R. Tú eres mi refugio, me rodeas de cantos de liberación.

Dichoso el que está absuelto de su culpa,
a quien le han sepultado su pecado;
dichoso el hombre a quien el Señor no le apunta el delito
y n cuyo espíritu no hay engaño. R.

Habla pecado, lo reconocí,
no te encubrí mi delito;
propuse: «Confesaré al Señor mí culpa»,
y tú perdonaste mi culpa y mi pecado. R.

Alegraos, justos, y gozad con el Señor;
aclamadlo los de corazón sincero. R.

 

Aleluya Sal 32, 22
R. Aleluya, aleluya, aleluya.

  1. Que tu misericordia, Señor, venga sobre nosotros,
    como lo esperamos de ti. R

 EVANGELIO
Hasta los cabellos de vuestra cabeza están contados
Lectura del santo Evangelio según san Lucas 12, 1-7

En aquel tiempo, miles y miles de personas se agolpaban. Jesús empezó a hablar, dirigiéndose primero a sus discípulos:

«Cuidado con la levadura de los fariseos, que es la hipocresía, pues nada hay cubierto que no llegue a descubrirse, ni nada escondido que no llegue a saberse.

Por eso, lo que digáis den la oscuridad será oído a a plena luz, y lo que digáis al oído en las recámaras se pregonará desde la azotea.

A vosotros os digo, amigos míos: no tengáis miedo a los que matan el cuerpo, después de esto no pueden hacer más.

Os voy a enseñar a quién tenéis que temer: temed al que, después de la muerte, tiene poder para arrojar a la “gehenna”. A ese tenéis que temer, os lo digo yo.

¿No se venden cinco pájaros por dos céntimos? Pues ni de uno solo de ellos se olvida Dios.

Más aún, hasta los cabellos de vuestra cabeza están contados. No tengáis miedo: valéis más que muchos pájaros».

Palabra del Señor.