Vengo a tus pies, para adorarte,
y verter mi agua, más preciada.
Un perfume que, lo derramaré ,
porque que lleva dentro, mi alabanza.
Y su frasco rompo, porque es todo para ti.
Y no quiero que nadie, lo pueda más abrir.
Hoy yo quiero darme a ti,
y entregarte mi corazón,
con todo el amor,
del que soy capaz.
Todo lo que soy te lo doy,
nada más deseo Señor,
que darte mi amor,
con esta humilde canción.
Tú eres mi Dios, yo soy tu creación,
esa que quisiste, desde siempre.
Heme aquí que soy, vivo por tu amor,
y quiero que, sepan que te amo.
Has enamorado, a este mi corazón,
que ahora solo late, cuando escucha tu voz.